El último traslado de Nuestra Señora de la Fuensanta Coronada tuvo lugar este viernes, desde la parroquia de San José y Espíritu Santo a la Catedral.
Este era un día especialmente dedicado a todos los jóvenes cofrades de Córdoba, de ahí que la parroquia de San José y Espíritu Santo, en cuyo altar mayor se encontraba la Virgen de la Fuensanta, estuviera abarrotada de jóvenes representantes de sus respectivas hermandades dispuestos a participar en la procesión.
La misa anterior al traslado fue oficiada por el párroco y delegado de hermandades Pedro Soldado, quien exhortó a los jóvenes a sentirse cofrades y a participar en sus respectivas hermandades.
Un nutrido cortejo compuesto por los grupos jóvenes se puso en marcha al término de la misa para acompañar a la Virgen de la Fuensanta. Durante el recorrido por el Puente Romano se realizó una ofrenda floral ante los monumentos a San Rafael y los Santos Mártires, San Acisclo y Santa Victoria. Una vez en la Catedral, una oración de despedida dejó a la Virgen de la Fuensanta en el altar mayor, para ser preparada para la procesión del sábado.